LIMONES EN CONSERVA ESTILO MARROQUÍ
La primera vez que vi un frasco así fue con mi amiga Cristina. Estábamos en una linda tarde de asador y de pronto, de su gran refri, sacó un frasco donde alcancé a ver una especie de pasta amarilla, tomó un cuarto de limón macerado y lo embarró con tal seguridad casi como mantequilla sobre unos enormes cortes de carne, parecía una profesional de la cocina; de hecho lo es.
Ese día, me enseñó qué hacer con esos bonitos limones amarillos: una deliciosa conserva de limones con potente sabor.
Limones estilo marroquí, limones en conserva, limones en salmuera, limones encurtidos, lo bautizan con muchos nombres.
Después de explorar más, decidí hacer mi propia mezcla especiada hace seis meses, todavía tengo de este frasco en mi refrigerador con sus estrellas y siluetas flotando.
Sería difícil enumerar las palabras para explicar todo el sabor que ha agarrado en este tiempo.
Intenso, saldado, ligeramente picante y deliciosamente amargo; tiene un poco de "umami": como le dicen a ese extraño y quinto sabor.
De vez en cuando, me como unas delgadas tiritas de cáscara y le encuentro algo distinto.
¿Cómo usarlos?
Aquí viene la parte divertida:
Les llaman limones marroquí porque muchas de las recetas de este estilo los usan en arroces y en varias recetas cocinadas en tajines (recipiente de tapa como cono).
También pueden preparar / marinar:
-Pescado, pollo, camarones, carne.
-Agregar al cous cous o Tabuleh
-Aderezar un Hummus
-La cáscara finamente picada es un buen toque para aderezos de ensaladas
-Espagueti al limón
Hay una enorme cantidad de usos donde un toque de estos rechonchos limones, le dará un exótico sabor aventurero a sus creaciones.
Intenso, saldado, ligeramente picante y deliciosamente amargo; tiene un poco de "umami": como le dicen a ese extraño y quinto sabor.
Ingredientes
-5-7 Limones amarillos
-Un chorrito de aceite de oliva
-Sal de mar (bastante)
-Agua
-3-4 Dientes de ajo (depende el tamaño del frasco y cantidad de limones)
-Especias al gusto. (yo usé: estrellas de anís, chile rojo, pimientas, semillas de mostaza y cilantro, clavo, canela y laurel)
Preparación
-Lavar bien los limones (si tienen cera, tallarla bien con agua caliente)
-Abrirlos -sin cortarlos por completo- en forma de cruz, a lo largo
-Llenar cada limón de sal de mar (bastante, unas dos cucharaditas por limón), cerrarlos presionando para que no escape la sal.
-Introducirlos en un frasco limpio, apretándolos bien hasta el fondo. Tapar muy bien. Si no caben, dejen uno fuera. Usaremos el jugo.
-Dejar que reposen 24 horas en un lugar fresco y obscuro.
-Al día siguiente, abrir el frasco, introducir todas las especias, una cucharadita de azúcar (al ras), el jugo de un limón amarillo y presionar los limones hasta el fondo. (Van a soltar más jugo)
-De todo el jugo que liberen, faltará un poco para cubrirse de líquido. Aquí rellenan con agua hasta que queden bien cubiertos de líquido los limones. Yo dejé espacio y rellené con aceite de oliva un tercio del frasco.
-Cerrarlo bien, meterlos al refri* y esperar pacientemente cuatro semanas y listo.
-*Muchos procesos de fermentación los dejan a temperatura ambiente en despensas obscuras. Yo prefiero hacerlo en el refrigerador, me siento más segura de que no se forme algún monstruo raro en mis conservas.
-Cada que los usen y liberen espacio en el frasco, apachúrrenlos, soltarán jugo por montón. Pueden rellenar cada rato con agua y/o aceite de oliva y mientras que estén todos cubiertos de líquido, (sobre todo con el aceite de oliva) se van a preservar meses.
Los míos tienen seis meses.
Entre más pasa el tiempo, se concentran los sabores; son una delicia.
Gracias Cristina por sacar tu frasco secreto ese día.